Inauguramos en nuestra web una nueva sección llamada «El ritmo de las estaciones», que nos acercará a la naturaleza de una forma artística, a través de la pintura, maestra de las artes.
Nuestro compañero Lluis Sogorb es un enamorado de las aves, miembro también de la Asociación Española de Artistas de la Naturaleza (AEAN) y de SEO, la Sociedad Española de Ornitología. Plasma sus creaciones con diferentes materiales como grafito, tinta, pigmentos… y ha trabajado ilustrando conocidas guías de aves y libros divulgativos.
Además de sus conocimientos directos como naturalista, Luis es un apasionado conservacionista y divulgador de la naturaleza, en su entorno más inmediato, Monóvar, en la provincia de Alicante.
Le hemos propuesto una sección sobre las estaciones para que nos muestre cómo un artista de la pintura plasma esos ambientes cargados de momento y de las sensaciones que nos trae la naturaleza.
http://pinceladasdenaturaleza.blogspot.com.es/
EL RITMO DE LAS ESTACIONES
El visitante invernal
Por Luis Sogorb
http://pinceladasdenaturaleza.blogspot.com.es/
Invierno, la estación del frío, de la vida adormecida. Animales y plantas desarrollan tácticas para hacer frente al período más exigente del año. Los hay que reducen su actividad y entran en una especie de sueño hasta que las cosas mejoren. Los hay que se fabrican abrigos para combatir el frío, y los hay —las aves, por ejemplo— que utilizan aquello que tanto envidiamos de ellas los humanos para huir de las bajas temperaturas y de la escasez de alimento: su capacidad para el vuelo.
Así, durante el otoño, muchas aves realizan sus fantásticos y enigmáticos viajes migratorios. Especies que criaron en nuestras tierras las abandonan hasta el próximo año, y son reemplazadas por otras que compartirán el frío con nosotros.
Entre las aves que invernan en la península ibérica se encuentra el lúgano (Carduelis spinus), un pequeño fringílido que se desplaza hacia el sur de sus áreas de cría distribuyéndose por toda la Península. Algunos años se producen irrupciones de un mayor número de individuos, como consecuencia de la escasez de alimento en las áreas de invernada norteñas.
Utilizando solamente lápices de grafito de diferente dureza, he representado la escena de un encuentro con un precioso macho de lúgano —posado en una rama de un olmo que se resistía a desprenderse de sus hojas—, una fría mañana de enero que, para sorpresa de todos, amaneció nevada.
Datos de la obra:
Título: El visitante invernal
Técnica: Grafito sobre papel
Medidas: 38 x 25,5 cm
Año: 2010