Acaba de publicarse un corto documental de ocho minutos y medio de duración titulado “Els últims llops marins de l’illa de Tabarca” (Las últimas focas monje de la isla de Tabarca). Se trata de un documental dirigido por Javier Falcó que relata el fatídico día en que la última pareja de foca monje que vivía en la isla de Tabarca (Alicante) fue capturada a finales de mayo de 1938.
La foca monje (Monachus monachus) ya extinguida de la península ibérica, está en grave peligro de extinción a escala mundial. Apenas sobreviven diseminados algunos ejemplares en Turquía, Grecia o Madeira. En Cabo Blanco, entre el Sáhara Occidental y Mauritania, subsiste la única colonia estable de foca monje. La colonia tiene unos 200 ejemplares de un total mundial estimado en unos 500 individuos aproximadamente.
Con una clara intención de hacer reflexionar al espectador sobre nuestra responsabilidad en la conservación de nuestro patrimonio natural, intenta dejar poco margen a la duda y al olvido de un lamentable hecho, que hasta la fecha no se había podido relatar con precisión.
Para la realización del corto se ha contado con la colaboración de tres grandes profesionales. Se trata de Rafa Herrero, que amablemente ha cedido las imágenes de foca monje en libertad, de Jaime Brotóns que se ha encargado de grabar los planos aéreos con un dron y de la valiosa aportación de Toni Pau, que ha cedido su voz para contar esta historia. Ha contado también con la colaboración de la Reserva Marina de la Isla de Tabarca y del Museo de Nueva Tabarca (Ayto. de Alicante).
Imágenes bellas que sumergen al espectador en un mar de emociones, para enviar un claro mensaje: que en la actualidad no cometamos los mismos errores con otras especies que están pasando por un trance similar.