1.- ¿Alfonso, como convive tu espíritu conservacionista con tu obra, en qué medida se apodera de tu inspiración en la búsqueda de esa fotografía soñada?.
Desde muy pequeño, mi afán naturalista me hizo intentar transmitir mi pasión por ese medio ambiente que nos rodea. La crisis ambiental, que vivimos, me hizo darme cuenta que necesitamos colaborar en un cambio de la sociedad que evite esa pérdida de nuestro medio ambiente “natural”. Por eso, desde joven, me dedico a educar y divulgar apoyado en una herramienta muy potente, la fotografía. Mis imágenes iban encaminadas a facilitarme esta tarea sin mayores pretensiones.
Ahora, trabajo intensamente para hacer de la fotografía de naturaleza una herramienta idónea para la conservación, pero no me conformo con que cualquier buena imagen pueda contribuir ocasionalmente para tal propósito. Creo que, la búsqueda y la creación de imágenes que inspiren y muevan a la gente a cambiar comportamientos y a entrar en acción, requieren la comprensión de las cuestiones necesarias para contar historias y/o educar en el cambio. Y todo eso, intentando llevar una trayectoria ética y purista, para mantener esa credibilidad tan necesaria en un fotógrafo conservacionista.
2.- ¿Crees que a través de la fotografía se pueden despertar conciencias y potenciar en la humanidad el respeto a la naturaleza?
La fotografía es una herramienta idónea, pues nos permite aproximarnos de una forma artística a la problemática del medio ambiente y conmover a los espectadores.
En este mundo, donde las sociedades están cada vez más distanciadas de la naturaleza y cada vez somos más dependientes de los medios de información para saber de esta. La fotografía de naturaleza, supone una verdadera oportunidad para a volver a conectar a la gente con su entorno natural.
Como ya he dicho, la fotografía puede ser una herramienta ideal para la construcción de conexiones entre personas y la resolución de problemas. Es una realidad que ya desde su nacimiento, la fotografía ha buscado despertar conciencias. Como ejemplo, tenemos la fotografía documental social y a Jacobs Riis que en 1890 publicó un libro donde ilustró los barrios más pobres de Nueva York, consiguiendo que los políticos actuaran mejorando las condiciones de estos habitantes.
Después han surgido muchos más ejemplos, destacando en su vertiente medio ambiental a Carleton E. Watkins. Este fotógrafo y sus fotos, lograron que, en junio de 1864, el Congreso de EE.UU. aprobase una ley (firmada por Abraham Lincoln) estableciendo a Yosemite como primera reserva natural de la nación. Posteriormente, la fotografía fue utilizada de nuevo para conseguir apoyo para la protección de Yellowstone, ayudando a crear el primer parque nacional del mundo.
3.- ¿Desde tu punto de vista conservacionista, ¿qué opinión tienes de los hides de empresas?
En los últimos años, han surgido multitud de empresas dedicadas a este tipo de actividades. Por eso, tanto la administración como los propios empresarios, deben prestar especial atención a los riesgos y amenazas que esta “nueva” modalidad turística puede suponer para la conservación de estos recursos vivos y muy frágiles que se pretenden aprovechar.
También creo, que estas empresas, además de cumplir los requisitos legales y administrativos, deben trabajar desde los principios de la observación de un código ético específico en el cual se regulen aspectos como: instalaciones integradas en el medio y de fácil retirada, control veterinario de los alimentos y de las instalaciones, que su ubicación y actividad no produzca una alteración grave de comportamientos, etc.
Entiendo que deben tener unos planteamientos turísticos respetuosos con el entorno y sus habitantes. Por eso, deben asumir un compromiso firme con la conservación, mediante acciones como el retorno económico de una parte de los ingresos a los propietarios de las tierras donde se encuentran las especies amenazadas, la comunicación de los valores ambientales o la subvención de proyectos de conservación y educación ambiental en la zona.
Pienso que cualquiera de estas empresas, constituidas de forma legal, que ofrezca este tipo de servicios de fotografía desde hides, siguiendo estas premisas y condiciones, debería ser compatible con la conservación y me merecen todo el respeto.
4.- ¿Qué retos se te plantean como vocal de Conservación en la Junta Directiva de AEFONA?
El principal reto que asumimos dentro de este comité, es conseguir impregnar de ese espíritu conservacionista y de buenas prácticas a la propia asociación. Que cada imagen, texto o acto de AEFONA, esté íntimamente ligado con este tema tan importante.
Pero tampoco podemos olvidar que, el objetivo último que nos planteamos en esta comisión es impulsar la conservación ambiental a través de una fotografía de naturaleza que respete los más exigentes estándares éticos. Por eso, desde la comisión, pretendemos que cada acción o proyecto que emprendamos, mantengan los más altos estándares éticos y sean fieles a los principios de integridad, respeto y profesionalidad.
Por eso, nos gustaría ayudar a capacitar y mejorar la disponibilidad de los fotógrafos de naturaleza para que la cuiden y se centren más en temas de conservación. Por otro lado, debemos intentar que las administraciones, además de las organizaciones de investigación y conservación, incorporen el uso de la fotografía profesional en sus programas, reconociendo su valor y contando más con el colectivo.
5.- ¿Cómo trasmitirías la esencia del Código Ético de AEFONA?
Esta pregunta es muy sencilla, “nunca pondrás en riesgo la vida de cualquier especie por obtener una fotografía”. Por eso, queremos promover la capacitación en materia de buenas prácticas entre los asociados, para que el respeto por la naturaleza prevalezca sobre cualquier actividad fotográfica desarrollada en el entorno natural.
También es fundamental redoblar los esfuerzos en la formación de los jóvenes fotógrafos, para que las nuevas generaciones, sean un ejemplo de integridad y comportamiento a nivel internacional.
6.- ¿En qué fases de tu trabajo está más presente el Código Ético de AEFONA?
Como fotógrafo intento que esté presente en el cien por cien de mi actividad. Pero también cuando imparto cursos, talleres o charlas, insisto mucho. Quiero destacar aquí, mi participación con el prestigioso concurso internacional Montphoto, donde colaboro como asesor para que las imágenes participantes cumplan este código ético.
Pero es verdad que, aunque la mayoría de la gente tiene esa predisposición, algo de conciencia y conocimientos, la realidad es que necesitamos que entiendan mejor el concepto de naturaleza o medio ambiente, para poder reemplazar la indiferencia ambiental con una nueva cultura de admiración y pasión por nuestro hermoso planeta.
7.- Según tu opinión, ¿nuestros socios tienen un comportamiento ético cuando están haciendo fotografías en la naturaleza?
Como explicaba antes, en general el socio piensa que tiene un comportamiento ético bastante elevado (refiriéndonos al comportamiento con los seres fotografiados), aunque creo que todavía queda bastante camino por recorrer y es aquí donde se nota una gran diferencia entre los fotógrafos que además son naturalistas y atesoran una gran cantidad de conocimientos adquiridos durante muchos años de campeo y los nuevos fotógrafos, más tecnológicos, que aunque no desean realizar malas prácticas, muchas veces, y sobre todo por desconocimiento, actúan de forma poco ética.
A pesar de lo difícil que es encontrar ese punto intermedio entre lo que está bien y lo que está mal, ya que esto depende del fuero interno de cada uno, creo que la diferencia estaría en practicar o no, una fotografía con malicia intencionada. Y esta intencionalidad, por suerte, no es lo habitual que podemos encontrar entre nuestros socios.
8.- ¿Piensas qué, como socios de AEFONA, deberíamos difundir nuestro Código Ético y tratar de que llegue a todas las personas que disfrutan de la naturaleza con el fin o no de hacer fotografías?
No solo lo pienso, sino que creo que debería ser un compromiso de cada socio. También es uno de los principales objetivos con los que trabajamos desde la comisión de ética y conservación.
De hecho, tenemos varias actividades encaminadas a este fin, como por ejemplo que la mayoría de los concursos de fotografía de naturaleza, recomienden en sus bases que ninguna de las fotos incumpla este decálogo de buenas prácticas o código ético. También estamos preparando, junto a otras asociaciones como SEO Birdilfe, un nuevo Código Ético específico sobre la fotografía de aves.
Esperamos ponernos en breve a actualizar nuestro manual de buenas prácticas que además incorporará una explicación más detallada y exhaustiva de los apartados del decálogo para que nuestros socios tengan unas recomendaciones más claras de cómo actuar y cómo difundirlo.
9.- Dada la velocidad con la que cambian las cosas en nuestra sociedad, ¿tú consideras que hay algún punto del Código Ético que se ha quedado obsoleto o que habría que introducir alguno nuevo?
Aunque es verdad que la sociedad está cambiando muy deprisa, la esencia del decálogo creo que todavía es la misma. Y es que, la definición de la ética nos dice que esta trata de la moral. Y esto, por suerte o desgracia, concierne al fuero interno de cada persona. Pero, como asociación, sí que es verdad que, hay voces pidiendo algunos cambios, especialmente en lo referente a la alimentación con presas vivas. Pero, personalmente creo que nunca deberíamos sacrificar un ser vivo para hacer una foto. De todas formas, en la futura renovación del manual de buenas prácticas, vamos a crear grupos de trabajo amplios y con buena representación de los distintos sectores, que aborden todos los temas y que los traten desde todos los puntos de vista, para mejorar y consensuar este Código Ético.
Por otro lado, es verdad que, algunos temas más tecnológicos, como por ejemplo, el uso de drones, necesitan de su estudio en profundidad y revisión para su inclusión dentro del Código.
Creo que, además, el nuevo tratamiento de la imagen por parte de software ya sea en cámara o en programas, va a crear imágenes “diferentes” y va a ser algo que, en un futuro, va a dar mucho que hablar. Una buena iniciativa, empieza a ser la certificación IRCC, que trabaja la honestidad y buenas prácticas en la fotografía.
Podéis encontrar más información sobre Alfonso y su trabajo en su web: https://www.doylataguerra.com/
Grande Alfonso!! 😊