El pasado 5 de noviembre, a raíz del XXI Congreso de AEFONA, nuestro compañero Carlos Dorado publicó un post en el foro Naturforo Aefona (que muchos ya habréis leído), que queremos difundir y compartir con todos vosotros.
Nos habla de las razones por las que cree recomendable asociarse a AEFONA, tanto para los que ya son miembros de alguna asociación de fotografía de naturaleza a nivel regional o local, como para los fotógrafos que aún no pertenecen a ninguna asociación.
Consideramos que merece la pena leerlo y reflexionar sobre él, así como darlo a conocer a todos aquellos fotógrafos amantes de la naturaleza.
¿Por qué también AEFONA?
Bueno, no sé por dónde empezar… Este es mi primer post desde que he venido del congreso de AEFONA en el que voy a ir comentando temas interesantes de los que se ha hablado.
En este caso es para hablar expresamente de AEFONA (la Asociación Española de Fotógrafos de Naturaleza).
En una ocasión le planteé mis dudas a José Benito (actual presidente de AEFONA) sobre si hacerme socio o no de AEFONA. En mi situación, no podía hacer ninguna salida ni ir prácticamente a nada (el congreso ha sido una excepción que difícilmente se repetirá). En definitiva, estaría pagando 70 € al año (en la actualidad se ha bajado a 50 €) para no ir a las salidas, ni congresos, ni nada. Me parecía tirar el dinero. Sin embargo, Benito me explicó algo en lo que yo no había reparado: el hecho mismo de ser socio ya representa un camino que se quiere seguir, una idea que se quiere proteger. No es lo mismo una asociación de 50 socios que una de 500 o una de 5000. A la hora de tener peso social, influye mucho. Ser de AEFONA no es solo entrar en un grupo de fotógrafos de naturaleza para conocerse y aprender juntos, significa un mensaje social: «Yo quiero proteger esto que fotografío». Cada socio es un ‘empujoncito’ a favor de la protección de la naturaleza. Aquello sí me convenció, y entendí que mi implicación en la Asociación era hacer algo por la naturaleza, y en definitiva es un gasto asumible anualmente por mucha gente, si además va a repercutir en un beneficio tan grande.
En la actualidad, somos algo más de 500 socios… En un país en el que se hace tanta fotografía de naturaleza, esto muestra que la Asociación, entendida como un medio para conservar y proteger nuestra naturaleza, no ha llegado a los fotógrafos. No ha llegado con este sentido, con esta utilidad tan grande que se le puede dar, sino que la mayoría de la gente que la conoce la ha entendido como yo al principio, como un grupo de fotógrafos.
En el congreso hubo una interesante mesa redonda de conservación con miembros de otras asociaciones como AFONAMA, FONAMAD, ASAFONA, AFONIB y otros, y la sensación general fue la del deseo de aunar fuerzas, la de pertenencia, en un mismo camino. Muchos nos dimos cuenta de que es necesario apoyar a las asociaciones regionales y, además, todos deberíamos embarcarnos en AEFONA, de manera que uno perteneciera a su asociación y a AEFONA al mismo tiempo, porque no es lo mismo 500 que 5000: se multiplican las ideas, las posibilidades, y se llega a cientos de sitios más y con más fuerza. Mostrar la naturaleza en pequeños grupos sirve para afrontar pequeñas batallas necesarias, pero unirnos además en un gran objetivo común puede hacer que la voz del fotógrafo de naturaleza se escuche alto y claro ante muchas personas que ahora viven ajenas o ignorando lo que se está perdiendo.
Todos habéis visto la problemática medioambiental en todo el mundo. Estés en la provincia que estés, seguro que conoces alguna barbaridad que se ha hecho en tu zona para la construcción, para crear cultivos o para otra cosa… Algunas veces, el daño es pequeño, pero sabemos que, en muchas ocasiones, ecosistemas importantes y animales han sido apartados a un segundo plano por otros intereses. Esto no se soluciona solo protestando o quejándose, sino que hace falta que estemos unidos en una misma iniciativa, porque dispersos hacemos poco, mientras que desde una asociación nacional como AEFONA, se pueden dar pasos firmes que lleguen a las personas y cambien las realidades que más tememos ahora.
Yo quisiera que cada uno reflexionara sobre la posibilidad de ser socio de AEFONA, no como el que se apunta a clases de inglés, sino como el que hace algo por lo que le importa, por esos campos a los que sales a fotografiar y tanto te gustan, por ese acantilado que te abstrae de todo al atardecer y que tantas sensaciones te ha dado, por todo eso, por nuestro precioso país. Tenemos que mostrar a la gente lo que tiene al lado de casa, la belleza, sus plantas y animales, los brillos y reflejos, las luces… y eso, si en vez de unas pocas voces lo hacen cientos o miles, hará que se cree una conciencia general, una educación en la protección de la naturaleza.
Nada más, solo espero que por lo menos lo penséis seriamente. Creo que este es un camino importante.
Si os parece oportuno moved este mensaje por las redes sociales todo lo que podáis o cread vosotros vuestro mensaje particular para apoyar esta iniciativa y darle la mayor publicidad posible. Es importante que se difunda entre todos los fotógrafos de naturaleza.
Un saludo.
Carlos Dorado
